domingo, 9 de noviembre de 2014

Delmira Agustini: la poetisa, la mujer...



La poesía es eso que habla mediante el silencio, desde la forma y no con el nombre; que dice todo sin decir nada.

Delmira Agustitni fue una de las más grandes poetisas latinoamericanas. Su obra, cargada de erotismo, marcó pauta en una época en la que las mujeres todavía no podían opinar ni mucho menos sentirse dueñas de su propio placer. Sus versos pusieron de rodillas al gran Ruben Darío, quien la comparó con Santa Teresa.

Nació en Montevideo, Uruguay, el 26 de octubre de 1886; hija del uruguayo Santiago Agustini y de la argentina Murtfeld Triaca. Fue un prodigio que a los cinco años ya sabía leer y escribir correctamente, a los diez componía versos. En 1903 comienza a colaborar en la revista La Alborada, publicando bajo seudónimo poemas y semblanzas de personalidades femeninas de la época; posteriormente también envía sus versos a las revistas Rojo y Blanco y Apolo. En 1907 publicó El libro Blanco, su primer poemario, el cual levantó admiración y sorprendió por su madurez. A este le siguen Cantos de la mañana (1910) y Los cálices vacíos (1913), en el cual se consolida definitivamente su estilo.

El 14 de agosto de 1913 contrae nupcias con Enrique Job Reyes, del que se separa un mes y medio después entablando demanda de divorcio. De inmediato mantiene correspondencia amorosa con escritor argentino Manuel Ugarte. Se le concedió el divorcio el 5 de junio de 1914 pero siguió manteniendo encuentros con Enrique Job Reyes, logrando así convertirse en amante de su ex-esposo. Sin embargo fue el propio Job Reyes quien dio muerte a al poetisa el 6 de julio de 1914 de dos balazos en la cabeza (o a puñaladas, según otras versiones), para inmediatamente después suicidarse pegándose un tiro. En 1924 se publican de manera póstuma El rosario de Eros Los astros del abismo; en 1969, Correspondencia sexual.

Delmira fue una poetisa revolucionaria que contó con la aprobación elogiosa de sus contemporáneos; representa un hito en la poesía femenina en lengua española por atreverse a poner la condición de la mujer en discurso y por atreverse además a decir que siente y qué siente. No ofrecía líricos cantos sensuales sino violentas expresiones de una sexualidad vivida al mismo tiempo como destino trágico y como camino de trascendencia y superación.  A decir del critico Zum Felde, "su verso no corre como claro río, ...sino como turbio torrente".


Solo nos queda preguntarnos que habría sido de la obra de esta gran mujer si hubiera vivido un poco más. Aun hoy, a 100 años de su muerte, sigue ganando lectores y cautivando con sus apasionadas composiciones. Poemas como "Carnaval" o "Medioeval" siguen sorprendiendo por su musicalidad. 

Con Delmira Agustini descubrí la belleza de la poesía. Cada verso, cada imagen mental, me llenaban y siguen llenando de una felicidad inexplicable. Sin duda recomiendo la lectura de su obra. Una sola cosa les advierto: se puede volver adictivo.

"El intruso"

 Amor, la noche estaba trágica y sollozante
 cuando tu llave de oro cantó en mi cerradura;
 luego, la puerta abierta sobre la sombra helante,
 tu sombra fue una mancha de luz y de blancura.


Todo aquí lo alumbraron tus ojos de diamante;
 bebieron en mi copa tus labios de frescura,
 y descansó en mi almohada tu cabeza fragante;
 me encantó tu descaro y adoré tu locura.


 Y hoy río si tu ríes, y canto si tú cantas;
 y si tú duermes, duermo como un perro a tus plantas.
 Hoy llevo hasta en mi sombra tu olor de primavera;


 y tiemblo si tu mano toca la cerradura,
 ¡y bendigo la noche sollozante y oscura
 que floreció en mi vida tu boca tempranera!

sábado, 8 de noviembre de 2014

"Finis Mundi" de Laura Gallego García


¿Sabían ustedes que durante la Edad Media la gente creyó que se iba a acabar el mundo en el año 1000? Sí, como en el 2000 y 2012. Finis Mundi es una novela histórico-fantástica de Laura Gallego que se ambienta precisamente en esta época calamitosa de la historia del hombre.

El protagonista de esta novela es Michel, un joven monje de la orden de Cluny que tras descubrir ciertos pergaminos que profetizan el fin del mundo para el año 1000, se propone evitar la catástrofe. Es el año 997 y para lograr su objetivo debe conseguir los tres Ejes del Tiempo, invocar al Espíritu del Tiempo y convencerlo de dar a la humanidad la oportunidad de prevalecer otros mil años.  Mathius, un juglar trotamundos, y su perro-lobo Sirius lo acompañarán en esta empresa. Nuestros héroes se convierten en el blanco de la mentada Cofradía de los Tres Ojos, secta satánica que busca el fin del mundo y también quiere conseguir los Ejes.

Ciertamente lo que no llama la atención de esta autora es la prosa. Su estilo es bastante cotidiano y sencillo. Empero tiene una capacidad imaginativa impresionante, historias bien estructuradas y personajes interesantes.

Finis Mundi fue la primera novela de Laura Gallego, publicada en 1999 por Editorial SM. Ganó el premio El Barco de Vapor de literatura infantil. Es una novelita que se lee de una sentada y que no decepciona para nada. Fantasía, aventura y un poquito de intriga se mezclan para dar pie a una historia muy entretenida. A pesar de la etiqueta de "literatura infantil" a mi me encantó, y eso que la leí a los 15 años. Es por eso que la recomiendo a todo mundo sin importar la edad.

Datos generales

Título: Finis Mundi
Autor: Laura Gallego García
Editorial: SM
Año: 1999
Páginas: 256

Acerca del autor...

Laura Gallego nació en Cuart de Poblet, Valencia, el 11 de octubre de 1997. Ha publicado más de una veintena de novelas, sobre todo del género fantástico, y ganado numerosos premios. Entre sus principales obras se encuentran Memorias de Idhun, Crónicas de la Torre y Donde los árboles cantan. 

domingo, 2 de noviembre de 2014

"Las Violetas son flores del deseo" de Ana Clavel


Me resulta difícil encuadrar a La Clavel en un género convencional. Se ha dicho de sus novelas que son eróticas, sin embargo a mi no me lo parecen. Ella trata temas profundos, tortuosos. Si hubiera un género llamado "Deseo", seguramente su obra figuraría en primerísimo lugar. 

En "Las violetas son flores del deseo" el protagonista narra su historia como si de una confesión se tratara. Julián Mercader, dueño de una fabrica de muñecas, siente atracción hacia su hija preadolescente Violeta y en un intento de no violentarla crea, en complicidad de su amigo y asistente Klaus,  la línea de muñecas púberes a las que da por nombre "las Violetas" (en referencia su hija).  Muñecas que son la viva imagen de niñas vírgenes, con esencias e incluso temperatura.

Las Violetas se convierten en un éxito y se empiezan vender en todo el mundo. Otros hombres con las mismas perversiones que Julián desahogan sus pasiones prohibidas en las muñecas. Pero esto hace que Mercader se convierta en objetivo de una sociedad secreta que pretende limpiar el mundo de la lujuria y la perversión. 

Con una prosa ingeniosa y potente, Ana logra meterse en el pellejo de un hombre y crear una historia que sin duda quedará en nosotros por mucho tiempo. Con "Las violetas..." Clavel ganó el Premio de Novela Corta Juan Rulfo de Radio Francia Internacional.

Los que me conocen saben de ami amor por esta autora. Dos cosas destaco de Ana Clavel. La primera es la presencia de la mitología griega en su obra y la segunda son las primeras frases; las que da inicio a las novelas y las que después dan inicio a cada uno de los capítulos que las componen. Esas primeras frases que con su certeza cautivan y atrapan. 

"La violación comienza con la mirada" es la formula inicial de esta maravillosa novela que me ha encantado y que no puedo dejar de recomendarles.

Datos generales

Título: Las Violetas son flores del deseo
Autor: Ana Clavel
Editorial: Alfaguara
Páginas: 122
Año: 2007

Acerca del autor...

Ana Clavel nació en la Ciudad de México el 16 de diciembre de 1961. Ha publicado novelas, cuentos, ensayo y minificción. Su trayectoria ha sido distinguida con numeroso premios, más recientemente el Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska por "Las ninfas a veces sonríen". Es una de las escritoras mexicanas contemporáneas más destacadas.

Fragmento

La violación comienza con la mirada. Cualquiera que se haya asomado al pozo de sus deseos, lo sabe. Como contemplar esas fotografías de muñecas   torturadas de Hans Bellmer, apretadas cual carne floreciente, aprisionada y  dispuesta para la mirada del hombre que acecha desde la sombra. Quiero decir  que uno puede asomarse también hacia fuera, y atisbar, por ejemplo, en la  fotografía de un cuerpo atado y sin rostro, una señal absoluta de  reconocimiento: el señuelo que desata los deseos impensados y desanuda su  fuerza de abismo insondable. Porque abrirse al deseo es una condena: tarde o  temprano buscaremos saciar la sed —para unos momentos más tarde volver a  padecerla.

sábado, 1 de noviembre de 2014

"Los chicos de alquiler no lloran" de Richie McMullen


Hace ya un tiempo que traigo ganas escribir reseñas literarias. ¿Se han fijado que los seres humanos tenemos la necesidad natural de compartir lo que nos parece hermoso? Y para dar inicio con este Blog reseñaré una mis novelas favoritas.

La literatura LGBT está poco valorada y debo admitir que de hecho me choca esta clasificación. ¿Alguien ha encontrado "Jane Eyre" en una estantería que diga "Literatura Heterosexual" cuando va a la librería?

Menciono esto porque "Los chicos de alquiler no lloran" (cuyo título original en inglés es "Enchanted youth"),  tiene precisamente esta temática. Pero en fin, a lo que nos truje chencha.

La novela nos cuenta, en primera persona, una etapa de la vida de un joven chapero. Es el año 1958 y Richie tiene 15 años cuando decide huir de su casa en Liverpool (escapando de los abusos de un padre alcohólico) e irse a Londres a probar suerte. En el tren con rumbo a su destino conoce a Alexander, un chico de familia bien del que... hasta ahí le dejo porque no quiero hacer spoiler.

Total que cuando llega a Londres descubre toda una comunidad de chaperos que, de alguna u otra forma, llevan una vida muy escabrosa, pero que se apoyan unos a otros. La vida en el Soho es dura y la sociedad intolerante. La prostitución es una actividad peligrosa, mortal en ciertos casos, pero con un extraño poder magnético para Richie.

Con personajes memorables (como el Bufón y Ángel) y una trama conmovedora, esta novela se ha convertido en una de mis predilectas. No es solo una historia de homosexualidad y prostitución, sino un verdadero relato de amor y amistad. Recomendaciones a amigos me han confirmado que no se requiere pertenecer al llamado circulo LGBT o ser mujer para disfrutarlo, incluso en la tapa debería tener la leyenda "Apto para todo el mundo".

Pero -si no  hay pero no hay cuento- debo decir también, ahora que menciono la cubierta, que lo único que no me gusta de esta novela es la portada, ya que no expresa para nada la sensibilidad de la historia. En ese aspecto me gusta más la portada de una de las ediciones en inglés. Nunca juzguen un libro por la cubierta.

Por supuesto no podía dejar de recomendarles esta maravillosa historia  que me hizo llorar en más de una ocasión.



Datos generales

Título: Los chicos de alquier no lloran

Autor: Richie McMullen
Editorial: Egales
Año: 1990
Páginas: 193

Sobre el autor...

Richie McMullen fue psicoterapeuta. En 1984 fundó Streetwise Youth Project, con base en Londres, siendo el primero en Gran Bretaña en ocuparse de las necesidades de los jóvenes ante la prostitución. En 1987 cofundó Survivors, el primer grupo de Gran Bretaña de ayuda a jóvenes violados. Publicó un ensayo donde aborda el espinoso tema de la violación, "Male rape: Breaking the silence on the last taboo" (GMP, 1990). Tiene su propia historia como victima de abusos. La narra en "Enchanted boy" (1989) y "Enchanted youth" (1990), sus autobiografías.

Fragmento

Cuando subí al tren en la estación de Lime Street de Liverpool aquella fría mañana de noviembre del año 1958, tenía tres puntos a mi favor: mi cuerpo, mi mente y la ropa que llevaba puesta. Mi cuerpo tenía quince años y estaba ansioso por emprender el camino hacia lo desconocido, ávido de toda clase de aventuras sexuales y de dinero.